18 de noviembre de 2009

¿Periodismo?

(Aviso: puede que esta entrada sea sólo una generalización, seguramente lo sea ... o no ...).

¿Por qué lo llaman periodismo cuando quieren decir negocio?
No voy a habla de la telebasura, ni de la prensa amarilla-rosa, ni de los supuestos periodistas de segunda división porque ellos, para la opinión pública, hace tiempo que dejaron de ser periodistas para ser cualquier otra cosa.
Tampoco voy a escandalizarme, a estas alturas de la vida, porque detrás de cada medio de comunicación importante haya un negocio montado. Así que no me voy a sorprender de su manipulación informativa al servicio de la cartera que paga su ética profesional.
¿Periodismo? Anuncios publicitarios de la empresa que paga a la agencia ... publicitaria, peridística, ¡qué más da!

El tema del secuestro del Alakrana es un buen ejemplo de ética periodística, ¿no?
Los periodistas se valen del dolor de las víctimas (no puedo evitar imaginar buitres volando entre campos de cadáveres) que asustadas quieren llamar la atención para que se solucione su problema.
Ya está, noticia fácil: empatiza rápido y vende muy bien. (Por supuesto para vender el periodista debe ponerse del lado de la víctima).
Precipitado el asunto ahora vienen las preguntas:
¿debe ceder un gobierno ante un chantaje? ¿debe pagar un rescate? ¿cómo ha influido la labor perdística?

Este tema es sólo un ejemplo, en España, estamos acostumbrados a que los periodistas inviten, con su información sesgada, a que formemos parte de tribunales populares constantemente: caso Marta del Castillo, caso Mari Luz, caso Neira, caso América Latina, caso EEUU ...
Para formar parte de un tribunal popular, deberíamos conocer todos los puntos de vista de la noticia, con este periodismo con el que nos despertamos cada día es difícil, muy difícil ...

2 comentarios:

jauhow dijo...

De la misma manera que hay que defender a capa y espada la independencia de los tribunales creo que no es lícito poner el foco de atención en la ética periodística. Parto de la base de que sí, es un negocio. Pero el problema no está en lo amarillos o rosas que sean los periodistas.

A un familiar de los secuestrados seguramente le parezca que los medios han sido la mejor manera de alcanzar su objetivo. Han conseguido más atención del gobierno gracias al revuelo mediático. Al gobierno quizás le parezca que les han puesto entre la espada y la pared. La oposición se frota las manos pensando en pedir cuentas y remarcar errores. Y a un ciudadano cualquiera quizás no le importa demasiado la legalidad si hay vidas en juego.

Para no alargarme más: la realidad, cualquier realidad, es poliédrica y no me parece justo decir que la culpa está sólo en una de las caras (sea la que sea).

Mar-ia dijo...

Jauhow entiendo y puedo compartir mucho de lo que dices, y por supuesto no quiero decir que la culpa ¿culpa? sea de los periodistas. Sólo tengo dudas razonables, por ej. en este caso justo cuando los medios toman partido, en ese momento, tienes razón y los familiares se vieron apoyados por la opinión pública, y ahora todos contestos porque ha salido bien, ¿podía haber salido mal? los piratas se vieron fuertes y pidieron y cualquier fallo podría haber sido nefasto.
Los familiares se reunieron con el presidente (¿era necesario que el presidente fuese el que saliera dando la cara? ¿es juego periodístico?) y este debió converlos para que no hicieran más declaraciones, los periodistas siguen intentando porque ya tienen la noticia que vende ...

Creo que estamos viviendo una era de realidad televisada y los mismos (periodistas) que se ríen del Ondas de Jorge Javier Vázquez, llenan sus espacios con prensa sensacionalista, con el tema emotivo y sin mirar las noticias desde todos los puntos de vista. ¿Y el armador que fue alertado de que iba a entrar su barco a una zona peligrosa, de eso no hablamos?
Como tú bien dices la realidad es poliédrica y es justo esa la crítica que le hago a los periodistas (sigo generalizando, muy mal por mi parte) a mi no me muestran todas las caras de la historia y eso no es periodismo eso es opinión, en un secciones equivocadas.