16 de enero de 2011

Después de 15 días sin humos (de tabaco)

todavía me sorprenden los fumadores que parecen no entender que su libertad de fumar estaba prohibiendo a los no fumadores su libertad de no inhalar humo de tabaco. La libertad no existe, existen seres con derechos. Esos seres se piensan libres cuando conocen a otros seres con menos derechos que ellos. Para no pensar que los individuos con más derechos son ogros que oprimen a los más débiles en derechos, se inventan teorías que legitimen esta situación de desigualdad.
Claro, en el caso concreto de la prohibición del tabaco en los lugares públicos, los fumadores que llaman a la rebelión y a seguir reivindicando su derecho a fumar, no quieren (o no pueden) pararse dos segundos a pensar qué libertad nos quedaba a los no fumadores antes de esta ley.

3 comentarios:

macarena dijo...

Hola!!! cuanto tiempo verdad?? feliz año y feliz todo!!
no esperaba menos al pasar hoy por aqui que un debate sobre la ley antitabaco!!

te doy la razon en tu ultima frase, pero para mi la ley sigue siendo excesiva, bares de fumadores y de no fumadores o prohibicion de la venta y consumo de tabaco, esta es mi opinion, ya lo sabes.

Tengo que reconocer, eso si, que es un gustazo que las cosas huelan por si solas y ya no este todo enmarañado por el humo del tabaco!

Mar-ia dijo...

La ausencia de humo de tabaco nos ha hecho ver con mucha más claridad cómo somos, qué queremos, cómo argumentamos, cómo convivimos, ...

¡Me alegro de que hayas vuelto!

Pily dijo...

Realmente cualquier ley que prohiba es "excesiva". Y lo de vender o no vender, aunque suene repetitivo, a mi me molesta no que me prohiban ir a 200 km/h, ¿por qué fabrican coches que pueden ir a esa velocidad?

Los fumadores siguen teniendo la libertad de fumar sin perjudicar a los no-fumadores, ya que ellos no lo han tomado la iniciativa por voluntad propia se les ha sacado una ley.