Luna: un descubrimiento

BIBLIA

No haber ido a religión en toda mi vida comienza a pasar factura. Esta mañana, antes de tomar el avión a Madrid, Aiti (la mayor de las niñas a las que he estado cuidando) me pide que le lea un cuento. ‘El que tú quieras’. Me da igual en qué idioma, porque no sabe leer y puedo inventar. Aiti me trae la Biblia. Joder, pensé. Le pregunto que si cree en Dios. Asiente con la cabeza, ‘pero papá y mamá no’, dice. Me muestra una imagen de Noé. ‘¿Qué hace ese?’ ‘Está construyendo una especie de Titanic donde va a guardar a sus animalitos’ ‘¿Por qué?’ ‘Porque va a llover muuucho y quiere salvarlos’ ‘¿Y cómo lo sabe?’ ‘Como tu papá cuando consulta el Meteosat en Internet, para ver si hace o no frío para ir al lago’ ‘Ah, entiendo. La Biblia es como Internet’ ‘Más o menos’, le digo. ‘De lo que una lee ahí nunca hay que fiarse’.

Luna Miguel en su columna de hoy en Público.

Una lástima que se acabe agosto, por la putada de volver al trabajo (por la putada de volver al trabajo, por la putada de volver al trabajo ...) y porque ya se termina también Ladras o mueres ... La seguiré leyendo aquí.