Se ha luchado mucho para que un trabajador tenga derecho a hacer huelga y a darse de baja cuando está enfermo. Los controladores aéreos de nuestro país han decido que toda esa lucha obrera les importa nada.No quiero entrar a debatir si merecen o no quejarse por sus contratos laborales, por su puesto defiendo que todo trabajador tiene derecho a reivindicar mejoras en su trabajo, ahora bien, la reivindicación tiene unos cauces legales que se deben respetar porque tenemos un compromiso con la sociedad y hacemos un trabajo necesario para la misma.
Decidir, porque les da la gana, que un día de máximo trabajo ellos están indispuestos es de una irresponsabilidad extrema, que siento, roza la ilegalidad.
¿Por qué no se han declarado en huelga, cumpliendo con sus servicios mínimos? ¿Por qué deciden apelar a una baja por indisposición? Como trabajadora me siento indignada, insultada, ofendida, dolida, asqueada, ...
Como ciudadana me siento avergonzada y triste de formar parte de una sociedad en la que creo no se tiene conciencia social, ni laboral.
4 comentarios:
Estoy contigo, sin entrar en sus reivindicaciones que comprendo aunque no comparto, pero te doy toda la razon, al final nos jodemos los mismos, perdemos los mismos y nos avergonzamos los mismos.
Moral?? que es eso??
Este tema es realmente preocupante, que un sector pueda parar un país y hacer una huelga en cubierta, sabiendo de ante mano que eso iba a perjudicar a mucha gente.
No hay derecho a tomarse la ley por su mano, no es justo. Lo del tema militar, yo no sé qeu habría hecho en su lugar para solucionar este problema.
¿Si no es con militares? se me ocurre:
mandarle sms: controlador te necesitamos, ven a trabajar, besos.
O llamarlos por teléfono: mira perdona, supongo que no vienes porque no tienes ganillas, pero ¿sabes? tienes un montón de gente esperando viajar. Si te parece, cuando buenamente puedas ven, ¿vale?
Si no hacen caso,¡yo llamaría a sus padres y madres! Les abría un expediente y les si fuesen reincidentes les quitaría el permiso de ciudadanía.
También se me ocurre ponerles una correa larga larga como los perros para que si no vienen tirar fuerte y sentarlos en las torres: ¡venga controla! (Sin ofender ¿eh?)
O si no mandar al Rey, a Zapatero y a Rajoy (para que no ponga pegas) puerta por puerta para llevarlos a la torre.
¿Qué te parece?
Me ha encantado la correa larga, para darle a libertad justa...
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